Para proyectar tu presencia ejecutiva con claridad, es importante entender por qué haces las cosas y cuál es tu verdadera pasión. Si no tienes definido tu mensaje y hacia donde vas, es muy probable que tu mensaje también sea poco concreto y otros no entiendan realmente quién eres, a dónde vas, y cómo deben de percibirte.

Adicionalmente a tener clara tu meta y por qué la quieres alcanzar, tienes que ser congruente y consistente con ese mensaje. Cuando otros perciben que no eres honesto, que lo que haces no tiene sentido con lo que dices, o que simplemente no te pueden descifrar, no podrás inspirar a otros.

Para lograr esto tienes que definir por qué estás haciendo algo: Hazte la siguiente pregunta cuando estés en la búsqueda de tus metas, ¿Por qué quiero este puesto? ¿Por qué quiero ese empleo? ¿Por qué quiero que otros me sigan? Eso que te mueve y que puede ser tu pasión, tiene que ser lo que sea tu motor para inspirar a otros. La remuneración económica viene de la mano, si solo piensas en hacer dinero, tu influencia y liderazgo se puede ver disminuida.

El otro día me comentó uno de mis clientes que su jefe siempre pregona que hay que estar motivado y pensar positivo para alcanzar las metas, pero que claramente se da cuenta como es impositivo y no le importa a costa de qué o de quién alcanza estas metas; que claramente se reditúan en un mejor bono para él.   Comenta que todos notan como no es que le importe que a otros les vaya bien, sino que lo que le importa es su propio ingreso y por eso intenta que otros trabajen para que él se vea beneficiado.

La motivación no es la misma cuando perciben que su mensaje no es congruente por que es muy obvio se pone en primer lugar manipulando a los demás a hacer su trabajo. Dejan de sentirse inspirados a ejecutar con energía por que el jefe dejó de pensar en su equipo y no les queda claro hacia dónde va.

Cuántas personas a tu alrededor conoces, que su mensaje está engañoso, que desconfías de sus verdaderas intenciones, y que no estás seguro si hacerles caso es lo correcto para todos. Esto se debe a que no son consistentes, no son congruentes y cuando dejan de confiar en alguien, cuando perciben que no hay honestidad, entonces la credibilidad, la reputación y el liderazgo de las personas se disuelve. Seguramente esta persona no tiene muy claro el por qué de sus acciones.

También he escuchado como muchos opinan estas personas tienen años en puestos altos y que les va bien dónde están. Quizá sí haya personas que logran mantener sus puestos por mucho tiempo, aun cuando su liderazgo y su influencia no esté claro. Últimamente veo en las compañías con las que trabajo que están habiendo muchos cambios organizacionales, y estas personas no son las primeras en mantener su lugar. Es cuando sus puestos se ven en riesgo y cuando intentan rescatar o proteger su puesto, la falta de liderazgo e influencia les impide sobrevivir a esto por que no están preparados, puede ser que sea demasiado tarde para que puedan volver a empezar.

Si te debe de importar generar un buen ingreso, eso siempre viene de la mano cuando tienes claro el por qué tu liderazgo y tu razón y pasión por hacer algo está clara y definida, la gente te sigue naturalmente. Define el por qué haces las cosas y lograrás mayores resultados con tu equipo.

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